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| Propuesta de pasquín publicitario |
Vale la pena atender a Blanco. Es ilustrativo ver como juega compulsivamente con el aparato electrónico que lleva consigo, que es el cordón umbilical que necesita para mantenerse conectado a la realidad, la suya, de la que habla como si fuera la única "verdadera".
Aunque de forma poco hilvanada, Blanco teoriza que los medios de información que quieran tener futuro como negocio deben coger la realidad y hacerla atractiva: comercializable.
El contenido de la intervención de Blanco evidencia que fue invitado a las jornadas como experto en pilotar empresas de información: Blanco no interviene como periodista y en ningún momento habla del oficio, cosa que deja clara al insistir una y otra vez en que su aportación central versa sobre el negocio de la información.
Blanco anuncia lo que podremos, seremos, haremos...
Metido en harina, Blanco afirma que el futuro de la prensa como negocio es prácticamente nulo. Tragedia que se debería fundamentalmente, según él, a que al paso de unos años todos los interesados en comprar información dispondrán de dispositivos electrónicos de última generación, tendrán conexión a Internet de banda ancha y, además, la inmensa mayoría de los compradores de información habrán renunciado a comprar prensa porque será carísima: ¡un lujo!, según el ponente.
Blanco insiste en que al paso de unos pocos años (él ha percibido que eso ya empieza a ser realidad) comprar, mantener y renovar periódicamente las herramientas electrónicas necesarias, más el abono a una conexión a Internet de banda ancha y demás gastos complementarios supondrá un coste global inferior a 1,20 euros diarios.
A estas alturas nadie sensato duda de que la prensa como negocio está condenada reciclarse, pues venderá menos ejemplares y solo será rentable para las empresas que no se limiten a contar lo ya sabido y las ocurrencias de cualquiera. No obstante, esa obligada mutación no solo se debe, ¡ni mucho menos!, a los motivos económico-comerciales que expone Blanco.
La intervención del ponente casi nada aporta que sea aprovechable, amén de obviedades que, para colmo, el ponente expone como quien acaba de descubrir la sopa de ajo y canta la receta sin mentar el pan ni el aceite y mucho menos, al cocinero/a...
Blanco certifica que La Voz actual marca el camino...
Sólo al final, Blanco dice algo de interés (aunque solo para quien desea conocer cómo es gestionado el periódico en el que él ejerce de estratega), al exponer los tres criterios y bienes que garantizan (¿?) el futuro de La Voz de Galicia: marca, credibilidad e información diferenciada (para concretar el tercer punto, Blanco subraya que la información local sea comercialmente atractiva y que el medio ofrezca exclusivas).
Blanco nada dice de la independencia frente al poder político, ni de la investigación y contextualización de los hechos y de sus protagonistas, ni de la calidad narrativa, ni del bagaje cultural y de conocimientos de quienes elaboran el periódico, ni de la logística, etcétera, etcétera y etcétera. Todo eso, al parecer, ya lo posee y practica La Voz y, lógicamente, ahora sus gestores centran esfuerzos en que sea más atractiva y en, por ejemplo, buscar exclusivas (¿exclusivas cómo la ruina de las cajas que fue silenciada durante años, o cómo el cuponeo que acaba de irrumpir en Galicia...?)
Blanco revela los tres misterios de Fátima... de Sabón
--- Marca. Entendida como marca comercial, La Voz es una marca conocida, sin la menor duda.
--- Información diferenciada. La Voz, ciertamente, ofrece información diferenciada, que además es tan original que mantiene las distancias con la realidad. Además, La Voz acostumbra a ofrecer variadas campañas en exclusiva: la anti-Lendorio, la pro AVE para ricos, la anti-nacionalismos periféricos, la pro Paco Vázquez, la anti-Caballero, la pro José Luis Méndez, la pro fusión de las cajas, la anti-Caballero, la pro Lei de Caixas, la pro Novagalicia, la anti-Mangouras y la pro Ministerio de Fomento, entre otras, sin olvidar las ya tradicionales durante las semanas previas a una jornada electoral.
--- Crediblidad. ¿Es creíble la realidad que vende La Voz?... ¡Rotundamete sí!, lógico pues que los esfuerzos de Blanco y de "el grupito" estén centrados en lograr que el periódico impreso y el digital sean comercialmente atractivos (bazar incluido).
Ignoramos las causas por las que Blanco omitió referirse a las dos características fundamentales de La Voz del futuro que él pilota: lo que La Voz expone es lo único cierto y lo que La Voz promociona es lo único necesario (de muestra un botón: las epístolas a los corintios que firma periódicamente el editor para que Galicia y los gallegos avancemos por el camino correcto).
Pulse aquí y acceda al vídeo, no lo dude, solo dura 10 minutos y tiene valor notarial.
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NOTA. Damos por hecho que el propietario de La Voz de Galicia SA, Santiago Rey Fernández-Latorre, conoce perfectamente lo mucho que da de sí Blanco como gestor y máximo responsable ejecutivo de una empresa de comunicación con el futuro garantizado...
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Dos aciertos indiscutibles
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Luis Miguel Lois Blanco,
director general de Corporación Voz y "experto" en gestión
de la
información
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Me tomé la molestia de visionar la intervención del profesor Blanco en la UDC y en el aspecto formal hay una cosa que me ha impresionado y otra que me inquieta.
Me ha dejado con la boca abierta el impresionante manejo que tiene con el teléfono móvil y, por otro lado, me ha producido zozobra que el conferenciante evite mantener la mirada al frente o en las personas a las que se dirige, lo que me ha recordado que quienes estudian el comportamiento humano coinciden en señalar que ese tipo de personas... ¡cuidadito con ellas!
Pero el profesor dio en el clavo en dos cuestiones que debo destacar como merecen:
--- 1º El experto gestor que es Blanco acierta plenamente al subrayar que «otros imponen la agenda y el periódico la reproduce» (textual).
En La Voz esos "otros" tienen nombres, apellidos y están en el Gobierno de Galicia. ¡Y que bien pagan la agenda! Además, el dinero que invierte la Xunta para que se cumpla su agenda es empleado por el Grupo Voz en beneficio de los trabajadores: con despidos... ¡Perdón!, con desvinculaciones, salvo en casos como el de Isolina Patricio.
--- 2º El profesor Blanco también acierta al decir que pocas cabeceras van a sobrevivir. Sin embargo, "el grupito" compra rifas para que La Voz sea uno de los periódicos que desaparecerán. Los trabajadores que quedan en plantilla deberían analizar los resultados de quienes practican la táctica del avestruz.
A propósito de lo expuesto por el profesor y teniendo La Voz tan clarividentes expertos, no me explico que la empresa invirtiera una fortuna en la compra de una nueva rotativa, pues en su intervención el director general afirma que «el papel a medio plazo será un producto de lujo» (después de oírlo cualquiera diría que a él lo nombraron para que la empresa deje de tirar el dinero en caprichos y lujos improductivos...)
Espero que en la siguiente conferencia el experto nos explique cómo amortizará La Voz esa y otras inversiones...
Pero hoy no toca hablar de cómo hacer rentable el dispendio del Gaiás-VTelevisión, ¿meterán la TDT en el banco malo como activo tóxico?
Firmado, Suscriptor.
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ENLACE al post titulado "Artículo del director general de La Voz: Sucedáneo de chocolate envuelto con retórica".
