Aquellos polvos traen estos lodos (2)

Representación gráfica del reparto
de cargas y responsabilidades por los
errores cometidos en la conducción
estratégica y en la gestión económica
de La Voz de Galicia

En fechas pasadas, alguien informó a ExVoz de lo que cobran algunos de los columnistas habituales, pero lo más importante es que también informó de los salarios de varios miembros de "el grupito", lo que sumado a otros datos de los que ya disponían los extrabajadores de La Voz me permite aseverar que el montante total de los emolumentos de las siete personas que componen el corazón directivo de La Voz de Galicia SA asciende a 1.400.000 euros anuales.
Concédanme el mismo margen de error que a la empresa de demoscopia del grupo, Sondaxe: un más o menos 3%.
A mayores, a esos 1,4 millones de euros hay que sumar los pagos en especies: coches, más mantenimiento, limpieza y gasolina; peajes, tarjetas de crédito, seguros médicos privados, almuerzos "de empresa", telefonía móvil, ordenadores personales y otros aparatos telemáticos, etcétera.
El sueldo, ¡solo el sueldo fijo!, del presidente de La Voz asciende a 600.000 euros anuales (2011), más gastos de seguridad y otros servicios "cotidianos", al margen de fiestas, premios, viajes, etcétera.
¿Pueden esos gastos, casi todos absurdos e inútiles como costes productivos, considerarse excesivos?
Depende de dos factores:
1) Si los beneficios anuales de la empresa y la proyección de futuro fueran buenos, podría admitirse que esos gastos no serían excesivos, pues los ejecutivos que gestionan bien o muy bien deben tener ingresos acordes con los beneficios que generan.
2) Pero en el caso de La Voz de Galicia SA, los resultados de la gestión de quienes se benefician de esos emolumentos son catastróficos y sin proyección de futuro, por lo que es injustificable premiarles con tanta generosidad.
Al contrario, cualquier empresa que actúe con lógica económica invitaría a esos directivos a marcharse y a varios de ellos los despediría sin contemplaciones.
Además, hay dos preguntas cuyas respuestas obligan a poner coto a ese dispendio:
¿Qué ocurriría si Novagalicia Banco ejecutara las garantías de que dispone sobre el dinero que debe La Voz de Galicia SA por la compra de la rotativa y si, además, ese banco que de momento es público se desvinculara totalmente de VTelevisión?
¿Qué pasaría si la Xunta dejara de regalar a La Voz de Galicia SA las ayudas y subvenciones a las que tan habituados están los bien pagados gestores del periódico?
Firmado, Suscriptor.
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ENLACES al capítulo anterior, "Aquellos polvos traen estos lodos (1)", y al siguiente, "Aquellos polvos traen estos lodos (y 3)".